Alberto Molinero, chef Michelin: "La gastronomía es un mundo pararelo al de los mortales" Infobae
Patricia Carro
Burgos, 2 dic (EFE).- Alberto Molinero no concibe la vida sin la cocina. La gastronomía es una pasión que impregna todo su ser, una forma de trabajar, de sentir y vivir que se ha visto reconocida en numerosas ocasiones pero que acaba de recibir uno de los mayores galardones que puede desear un cocinero: la estrella de la Guía Michelin para su restaurante Erre de Roca, en Miranda de Ebro (Burgos).
“Es un sueño cumplido. No lo buscaba, pero todos los cocineros soñamos alguna vez con tener una estrella Michelin”, ha admitido Molinero en una entrevista con EFE, después de recibir “con una alegría muy grande” esta distinción, anunciada en la gala celebrada el pasado 28 de noviembre en Barcelona.
Reconocido hasta en tres ocasiones como Mejor Cocinero de Castilla y León, Molinero ha asegurado que, aunque parece fácil, hay mucho trabajo detrás de un proyecto como Erre de Roca, que abrió sus puertas en 2022, y que si bien “sabían que podía encajar en la Guía Michelin, no era su objetivo principal”.
Erre de Roca es el restaurante “más personal” del proyecto gastronómico La Roca, que incluye otros tres restaurantes en Miranda, uno en Condado de Treviño y dos en Madrid, además de un obrador y un servicio de cátering, y que está a punto de inaugurar un nuevo establecimiento en Vitoria-Gasteiz.
“Mi idea era hacer mi cocina, mi restaurante más personal y llevarlo a cabo en mi ciudad, en Miranda”, ha apuntado Molinero, quien ha asegurado que continuarán con la misma filosofía, aunque “más ilusionados si cabe”, y que no van a subir los precios, algo que le han preguntado mucho durante las últimas jornadas.
Erre de Roca mantendrá sus menús degustación, Temporada (78 euros) y Erre de Roca (62 euros), muy centrados en el producto de temporada, aquel que se encuentra en el mercado a diario, buscando un equilibrio entre tradición e innovación.
“Nos gusta trabajar el producto de la zona y darle protagonismo desde la base tradicional, pero con toques de actualidad y vanguardia, y siempre con una técnica enfocada a realzar el sabor”, una muestra más de su pasión por la gastronomía.
Una forma de vida
El cocinero mirandés lo resume en muy pocas palabras: “La cocina es mi vida”; una vida entregada a un oficio que no le ha supuesto esfuerzo alguno, pues siempre lo ha vivido como un hobby, y que no cambiaría por nada del mundo.
“La gastronomía es un mundo paralelo al de los mortales”, o así lo ve Molinero, que cumple 45 años este diciembre, buena parte de los cuales los ha dedicado a la cocina, desde que entrase a formarse en la Escuela de Hostelería de Santo Domingo de la Calzada, tras lo cual pasó por algunas de las cocinas más prestigiosas del mundo.
Ahora, Erre de Roca se ha convertido ya en un referente gastronómico, y además, nada más anunciarse la afamada estrella recibió una avalancha de reservas, así que sus 20 plazas (24 máximo) están completas hasta bien avanzando 2024.
Molinero es consciente del reto que acaba de asumir pues, como él mismo dice, en la Guía Michelin “son muy exigentes”, pero cuenta con un equipo de profesionales “muy potente”, tanto en Erre de Roca como en el resto de establecimientos, “que es lo que ha hecho que se haya podido llegar a la estrella”.
Con la distinción a Erre de Roca, Miranda de Ebro se consolida como ciudad de referencia para la alta gastronomía, que disfruta ya de la cocina de Alejando Serrano, quien consiguió su primera estrella en 2021, y la ha vuelto a revalidar.
“En Miranda, desde hace años estamos aportando cosas diferentes; hay una actitud que se contagia entre los colegas”, ha apuntado Molinero, quien ha destacado que “hay gente muy profesional, bares, restaurantes y cafeterías que lo están haciendo muy bien”, al margen de las estrellas.EFE
pcr/mcm
(foto)
