Cuáles son los tres pasos que recomienda Microsoft para utilizar su inteligencia artificial Copilot Infobae
Copilot es una herramienta de inteligencia artificial diseñada por Microsoft para asistir en diversas tareas y parte de su encanto radica en su habilidad para procesar prompts (instrucciones basadas en texto) gracias a sus modelos avanzados de lenguaje generativo que le permiten comprender las solicitudes y proporcionar respuestas o soluciones acordes al contexto planteado. Aunque es clave redactar esta orden de manera que el resultado sea el más efectivo.
La compañía fundada por Bill Gates es consciente de ello y cualquier usuario puede maximizar sus beneficios siguiendo tres pasos básicos para interactuar con este modelo de IA: Acción, Estilo, y Detalles clave. Esta metodología, conocida por las siglas ASK (en inglés, Action, Style, Key details), simplifica el proceso de instruir a la IA para obtener respuestas optimizadas.
Recordemos que este tipo de tecnologías facilitan desde la programación de actividades cotidianas hasta la creación de presupuestos personalizados para viajes, sin necesidad de tener conocimientos especializados en informática. De hecho, son especialmente útiles para realizar investigaciones y optimizar el tiempo, gracias a su capacidad para entender instrucciones detalladas y responder en una variedad de formatos.
Acción: Definiendo la Tarea
El primer paso es definir claramente la acción que se desea que Copilot realice. Este paso implica comunicar de manera precisa y concisa el tipo de asistencia o tarea específica que se requiere de la IA. Presentar una solicitud detallada, como “Necesito ayuda para programar quince minutos diarios de tiempo de atención plena, por favor”, establece una base clara para las interacciones subsiguientes.
Esto es muy diferente a la búsqueda tradicional de internet, que se sustenta en el uso de palabras clave concisas. Es por ello que interactuar con Copilot se asemeja más a tener un diálogo con un asistente personal. Por lo tanto, se recomienda emplear un lenguaje más natural y descriptivo, expandiendo la solicitud más allá de comandos básicos para incluir el resultado específico deseado, como “Por favor, ¿puedes ayudarme a crear un presupuesto para mi viaje familiar de Nueva York a París?”.
Estilo: Formato de Presentación
Después de definir la acción, el siguiente paso es especificar el estilo o el formato en el cual se desea recibir la respuesta. Copilot es capaz de generar resultados en una amplia variedad de formatos, desde textos informativos hasta listas detalladas.
Especificar el formato, como solicitar recomendaciones para un club de lectura organizadas en una tabla con el título del libro, el resumen y preguntas de discusión, facilita la obtención de la información de manera que mejor se ajuste a las necesidades del usuario.
La flexibilidad de Copilot permite adaptar las respuestas no solo en términos de contenido, sino también en cómo ese contenido se presenta, ya sea en formato de texto, lista o incluso en preparación para ser insertado directamente en una hoja de cálculo.
Detalles Clave: Contexto y Preferencias
El tercer paso involucra proporcionar a Copilot detalles clave acerca de la situación, preferencias personales o cualquier otro contexto relevante que pueda influir en la personalización de la respuesta.
Añadir estos detalles permite afinar las recomendaciones o soluciones proporcionadas, asegurando que estas sean pertinentes y útiles.
Por ejemplo, informar a Copilot sobre el interés particular en géneros literarios específicos o sobre detalles logísticos de un viaje familiar puede transformar una respuesta genérica en una completamente personalizada y ajustada a las necesidades únicas del usuario.
Lo cierto, es que interactuar con herramientas de IA generativa mediante la metodología ASK simplifica el proceso de comunicación y aumenta la eficacia de los resultados obtenidos. Al definir claramente la acción deseada, especificar el estilo o formato de presentación preferido, y proporcionar detalles clave para personalizar la respuesta, los usuarios pueden aprovechar al máximo sus capacidades y convertirlo en un poderoso aliado para la creatividad, la productividad y la optimización del tiempo.
