Desestiman la demanda de un expolicía local contra un alcalde que dijo que había “mafia policial” y “manzanas podridas” en el cuerpo Infobae
El Juzgado de Primera Instancia número 1 de Ourense ha rechazado la demanda de un exoficial de policía local, Nemesio Gómez, contra el alcalde de la localidad, Gonzalo Pérez Jácome, por unas declaraciones que realizó en 2019 y en las que sostuvo que dentro de ese cuerpo de seguridad había una “mafia” y “manzanas podridas”. El tribunal ha descartado que estas manifestaciones del regidor afecten al honor personal del agente.
La resolución sostiene que Pérez Jácome, dirigente de Democracia Ourensana, no dirigía sus palabras de manera específica al demandante. Sí hablaba de un funcionario con antecedentes penales y en este sentido, y así lo valida el citado fallo, el denunciante reconoció en su interrogatorio que fue condenado en 2015 a una pena de un año y nueve meses de prisión por un delito de falsedad en documento público. En concreto, por intentar dejar sin efecto multas que habían sido impuestas a familiares y amigos. Por esto, dicta la justicia, “no se observa nada que fuera injurioso o que no fuera verdadero en esas palabras vertidas por el demandado”.
Añadido a esto, la corte subraya las inconsistencias en el testimonio de Gómez, quien inicialmente negó sentirse aludido por las generalizaciones del alcalde, para luego afirmar lo contrario. Este cambio de postura restó credibilidad a la reclamación de daño a su honor.
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El fallo emitido, aunque no definitivo y susceptible de recurso ante la Audiencia Provincial de Ourense, remarca la importancia de la especificidad en las acusaciones de injurias y difamación, estableciendo un precedente sobre cómo se interpretan jurídicamente las declaraciones públicas sobre grupos o colectivos sin identificar individuos concretos.
“No se ha practicado la más mínima prueba orientada a acreditar que en el año 2019 existiese ningún tipo de comportamiento ilícito en el seno de la Policía Local de Ourense y, mucho menos, por parte del querellante”, indica el instructor, el magistrado Javier Solé Vilas, en el auto, en el que indica que las declaraciones “cobran especial trascendencia si tenemos en cuenta que fueron realizadas por el alcalde y ante diversos medios de comunicación, cuyo impacto mediático consta en las actuaciones”.
Pérez Jácome y los funcionarios municipales
Horas después de hacer recerencia a esa “mafia policial” y “manzanas podridas”, Pérez Jácome quiso matizar y poner en contexto lo dicho: “En algunos trabajadores se puede decir que hay mafia de escaqueo. Pero también hay funcionarios que realmente quieren trabajar y están esperando a que se les presente un proyecto ilusionante. Muchos me dicen que vienen amargados a trabajar. Por ello hay que poner coto a las manzanas podridas, que son los que desmotivan a los que quieren trabajar, porque están viendo que los que tienen al lado, sin hacer nada, cobran lo mismo, o más”.
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El alcalde, muy popular por su particular forma de hacer política, ha puesto en duda en varias ocasiones la profesionalidad de algunos de sus funcionarios, prestándose a vigilar junto a su equipo si los empleados del Ayuntamiento cumplen con su horario y obligaciones, amenazando con expedientes a quienes incumplan y también a sus responsables directos.
Nada más llegar al poder, en 2019, precisamente cuando hizo las declaraciones que motivaron el mencionado caso, anunció la implantación de un sistema para fichar, que no se puso en marcha hasta 2022. En 2021, llegó a presentarse a primera hora de la mañana en las oficinas de la Praza de San Martiño, donde tienen su sede los servicios de Comercio y Termalismo, para dejar en evidencia a los trabajadores rezagados. Ni uno, destacó, llegó a su hora.
