Panteras de Cuernavaca, el equipo morelense que ha dejado huella en el futbol americano El Gráfico

El equipo de futbol americano Panteras de Cuernavaca cumplirá 42 años de otorgarle al estado de Morelos una identidad, legado y presencia en la actividad del deporte de las tacleadas.
La institución contó con la dirección como entrenador en jefe del experimentado Arturo Aldave Trulín, quien decidió seguir su trabajo con otras organizaciones deportivas.
“Por 38 años hemos tenido la oportunidad de participar con el equipo de Panteras.
Fueron muchos años de sufrir por tener las condiciones óptimas para lograr campañas de éxito.
Sin embargo y a pesar de todos los inconvenientes, el equipo siempre estuvo presente como protagonista estelar, ganando más de 40 campeonatos, en distintas Ligas”, recuerda el coach, quien primero tuvo un paso como jugador activo y el honor de jugar bajo la dirección de su padre, Arturo Aldave.
“El equipo de Panteras tuvo participaciones incluso a nivel internacional en un torneo en Cancún, cuando estos jugadores estaban todavía en una categoría juvenil e intermedia.
Hoy en día, la mayoría sigue jugando y en activo, en las categorías de Veteranos.
Ganando torneos y títulos, lo que es una obligación y objetivo, siempre que salimos a jugar”, agregó el legendario entrenador en jefe.
El año pasado, la Liga Mexicana de futbol americano integró a su lista de los inmortales, en el salón de la fama del futbol americano de México, el nombre de Arturo Aldave Trulín, como uno de los coach de mayor historia y aportación a este deporte.
“Esa designación al Salón de la Fama me dejó una grata satisfacción, en lo personal y familiar, con mis jugadores y a todos los elementos que pasaron por nuestras manos.
Sin duda, que es un reconocimiento a nuestra labor y trabajo”, aseguró.
El experimentado entrenador formó parte de los jugadores encargados de fundar el primer equipo estudiantil de la preparatoria número uno, dependiente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), llamados Mandriles.
Posteriormente, fundó el primer equipo de los Jaguares de Cuernavaca, en donde realmente comprobó su vocación, al formar a los primeros niños y jóvenes equipados en la capital del estado de Morelos y de quienes se recuerdan grandes hazañas deportivas en la Liga Nacional.
Asimismo, su historia se remonta a participar con otros clubes fundadores como Frayles y Potros, en donde ya su sólo nombre y presencia, garantizaban éxitos.
Igual impulsó a equipos como Jefes de Cuernavaca y Gallos de la Universidad La Salle (categorías infantiles y juveniles) aportando su capacidad y experiencia.
Como entrenador de Panteras, ya en categoría de veteranos, ha tenido la oportunidad de sumar más títulos nacionales.
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