Nada qué festejar para madres de desaparecidos de Ayotzinapa El Siglo de Torreón

Las madres de estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa dicen que nada tienen para festejar en este Día Internacional de la Mujer, sólo tienen un profundo dolor pues con la ausencia de sus hijos también las violentaron a ellas como mujeres.
El dolor en el alma y su sonrisa al evocar el recuerdo de su hijo se mezclaban en la expresión del rostro de Joaquina García Velázquez al hablar de Martín Jetzemaní Sánchez García, uno de los 43 estudiantes desaparecidos el 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
Originaria de Zumpango del Río, Guerrero, municipio Eduardo Neri, Joaquina habla de su hijo con voz entrecortada y con los ojos que se humedecen por las lágrimas que prefiere reprimir para no sucumbir a un llanto descontrolado.
“A Martín le encantan los mixiotes”, dice y los ojos se le iluminan.
Habla de su hijo en tiempo presente; el ahora, el de la vida, el de la existencia, el de la negación ante la posible muerte.
“A mi hijo le gustan mucho comer mixiotes.
Le gusta mucho el baile.
El deporte, principalmente.
Le gusta el futbol.
Es muy aficionado a todo eso y le gusta estudiar”, expresó.
Martín “es muy apegado a mí.
Mucho muy apegado, es muy cariñoso”, dijo con una leve sonrisa empañada por la nostalgia, en entrevista en la que se lamenta y manifiesta su enojo porque el anterior Gobierno Federal “sólo nos llevó por la mentira y el sufrimiento”, sin darles una respuesta certera y contundente respeto al paradero de sus hijos.
Sin embargo, Joaquina expresa que “con este nuevo gobierno sentimos esperanza, en el sentido de que cumplirá con la búsqueda de nuestro hijos”, aunque como mujer y como madre hoy vive el dolor de la ausencia día a día.
Indicó que “para nosotros como mujeres y madres vivimos con un constante y gran sufrimiento que yo, desde mi corazón, siento que nunca voy a superar".
Sin embargo, “tenemos la esperanza de que nuestros hijos regresen, que los tengan por ahí, pero el sufrimiento de más de cuatro años permanece y se hace inmenso como para las otras madres”.
Joaquina viste ropa humilde, su rostro moreno es la personificación de la tristeza y, según cuenta, su cabello largo se tiñó cano de la noche a la mañana, cuando empezó el suplicio de la búsqueda de su hijo.
Acepta que ha llorado día tras día, “pero el dolor no se acaba, el dolor es muchísimo”, y ahora el sufrimiento es mayor porque en su lucha por todos los rincones del país para encontrar a Martín desatiende a sus otros hijos.
“Ni por más reparación que nos quieran dar, nunca vamos a dejar de sentir este dolor en el pecho”, asegura Joaquina.
Martín ocupa el séptimo lugar entre los ocho hijos que parió Joaquina, quien asegura que prefiere saber dónde está su hijo a permanecer con el dolor que causa la incertidumbre de no saber su paradero.
“Si yo supiera que mi hijo.
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vamos a suponer que yo encontré a mi hijo muerto, yo siento que eso ha de ser un dolor menos, pero eso de no saber qué pasó, si nuestros hijos viven, si están muertos o dónde están, eso es lo que causa tanto dolor”, explicó mientras alzaba su mirada al cielo buscando una respuesta.
Joaquina sostiene que su reclamo no cesará hasta saber con verdad qué pasó con su hijo; “no vamos a parar hasta saber la verdad.
Vamos a seguir en esta lucha”.
Lamenta que además de los 43 estudiantes haya miles de jóvenes desaparecidos, donde las mujeres son las más vulnerables.
“En Guerrero a diario hay mujeres y niñas y jóvenes desaparecidas y no hay respuesta de lo que pasa con ellas.
Como madres y mujeres queremos que eso ya no siga”, sostiene.
En el marco de este Día Internacional de la Mujer, Joaquina sostiene que como mujeres “sabemos que valemos mucho, pero no lo quieren reconocer y por eso nos suceden tantas cosas”.
“Todo mi respeto para las mujeres, porque somos la cabeza de una casa y quienes damos la dirección a la vida de nuestros hijos”, enfatizó.
Añadió que "este día lo podremos festejar cuando haya un verdadero respeto a nosotras y se cumpla la ley en favor nuestro".
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