El robo de computadoras de Ignis y Swift en México desconcertó a Suzuki en Japón Expansión

Cuando la subsidiaria de Suzuki en México hizo un pedido de 80 computadoras para algunos de sus modelos Ignis y Swift, el corporativo en Japón no daba crédito a aquella extraña solicitud . Este componente, crucial para el funcionamiento adecuado del motor, no suele estar entre los pedidos habituales de refacciones que suelen hacer los 120 mercados donde se comercializan estos modelos, como sí lo están los neumáticos, filtros, bombas u otros componentes que suelen resultar dañados en colisiones, como defensas, puertas o faros. Ante la pregunta de Japón sobre "¿qué estaba pasando en México?", los directivos locales de la marca tuvieron que explicar que este fenómeno se debía a un problema de mercado negro. Quienes sustraían las computadoras a través de la salpicadera, luego las revendían por hasta 25,000 pesos. Como el vehículo queda inoperable e incapaz de arrancar cuando se sustraía la computadora, los propietarios afectados estaban dispuestos a pagar esta cantidad.

Para enfrentar esta problemática, los directivos de la marca en México decidieron anunciar que la marca instalaría las computadoras de reemplazo sin costo para los propietarios afectados. Esta acción tuvo un efecto inmediato en el mercado negro. El anuncio de la instalación gratuita de las computadoras redujo significativamente el incentivo para los ladrones. La ganancia por cada unidad robada disminuyó drásticamente, llevando a una reducción del 70% en el número de robos en la actualidad. “En el momento que nosotros anunciamos que la computadora es gratis, una computadora que te vendían en 25,000 pesos en el mercado negro, las empezaron a vender en 5,000", dijo Gerardo Macías, gerente nacional de ventas de Suzuki en México, en entrevista. A pesar del éxito inicial de esta estrategia, surgieron nuevos desafíos. La demanda de computadoras de reemplazo superó las expectativas, generando listas de espera que se extendieron por meses. Para garantizar el suministro continuo de estas piezas, incluso fue necesario traer a directivos japoneses para explicarles la situación y coordinar los envíos desde Japón. “Cuando explicamos la situación a los directivos japoneses, se sorprendieron al saber que había ochenta casos por mes. No podían entender cómo era posible, así que les mostramos videos de YouTube, Facebook y TikTok que documentaban los robos”, cuenta Macías. La presentación reciente de la cuarta generación del Suzuki Swift ha suscitado interrogantes sobre si la marca ha modificado el diseño del vehículo para abordar la preocupación específica del mercado mexicano acerca del robo de la computadora. "Dentro de las consideraciones para el rediseño del modelo, no se abordó el problema específico del robo de la computadora, dado que es una preocupación muy particular del mercado mexicano. Por ello, se contempló desarrollar una protección adicional para este aspecto", explicó Macías. Las imágenes compartidas por usuarios que han experimentado esta situación mostraban cómo los ladrones podían acceder al chicote, situado debajo de la salpicadera, para abrir el cofre. Por lo tanto, además de ofrecer el reemplazo gratuito, Suzuki ha ideado la instalación de un tubo que fija el chicote en una posición inaccesible con la mano. Este accesorio, disponible en los concesionarios por aproximadamente 2,000 pesos, impide que los ladrones puedan acceder al chicote y abrir el cofre para sustraer la computadora.