Sembradores de Amistad: legado solidario de Eugenio Garza Sada Milenio

Sembradores de Amistad es una agrupación altruista con base en Monterrey, que se ha distinguido por apoyar en áreas clave para el desarrollo económico y social del país, como la salud, la educación y la seguridad de los ciudadanos, a lo largo de más de ocho décadas de servicio y compromiso con la comunidad regiomontana.
La historia de Sembradores de Amistad se remonta a 1936, un año crucial para México.
En ese tiempo, los principales líderes empresariales de Monterrey tuvieron un desacuerdo con el entonces presidente de México, Lázaro Cárdenas; de manera paralela, algunos industriales rompieron sus lazos con el Club Rotario, que apoyaba al mandatario.
En este contexto de cambio y desafío político, algunos visionarios como José F.
Muguerza, los hermanos Eugenio y Roberto Garza Sada, y Manuel L.
Barragán, por mencionar a algunos, decidieron formar un club filantrópico con una identidad sólida y profundamente mexicana, así como una enorme visión internacional.
En su ideario, Sembradores postula el valor de la persona humana, de la familia, del Estado como gestor del bien común; de la aplicación de la justicia y la práctica de la caridad, a la vez que resalta la nobleza de la amistad, “que es incumbencia cordial y profunda de ayudar al amigo en la empresa de vivir”.
El club busca estimular la iniciativa particular, servir desinteresadamente a la colectividad, cultivar la idea de patria; enaltecer los valores espirituales y morales como patrimonio de la cultura universal, y buscar fundar clubes hermanos en la ciudad, la nación y los diversos países del mundo.
Contribuciones invaluablesA lo largo de sus 87 años de existencia, Sembradores de Amistad ha dejado una huella imborrable en la comunidad de Monterreyy más allá, pues el club se ha enfocado en apoyar la creación de instituciones vitales para el bienestar social, como el Cuerpo de Bomberos y laCruz Roja de Monterrey, en un compromiso inquebrantable con la seguridad y la salud; ha participado también en numerosas iniciativas sociales y brinda apoyo para conservar la salud visual, con cirugías de cataratas.
Asimismo, los Sembradores fundaron y mantienen escuelas, otorgan becas a estudiantes de preparatoria y universidad, crearon y financian hasta el día de hoy diversos orfanatos, asilos, centros de tratamiento contra adicciones, comedores, guarderías infantiles, casas hogar y centros de ayuda a grupos vulnerables.
Desde su fundación, se han emprendido campañas de ética profesional y empresarial, fomento de valores cívicos, éticos y morales, y patronatos que promueven la cultura, el arte, el deporte y la educación, así como organismos de salud pública e higiene, por mencionar algunas acciones.
Es importante notar que, desde los años 30, los Sembradores de Amistad propusieron temas que apenas hace unos años comenzaron a ser relevantes, como la cultura de la paz, la sostenibilidad, el civismo, la cultura del trabajo, la cultura de la legalidad y la tolerancia.
En su apogeo, Sembradores contaba con 40 clubes en Estados Unidos y Alemania, destacando por su presencia internacional.
Actualmente la organización opera tres clubes en Nuevo León: el Decano, el Regiomontano y el Sierra Madre, y ha expandido su alcance a nivel nacional e internacional, sumando un total de diez clubes en México y Estados Unidos.
Impacto sin fronterasEl impacto de Sembradores de Amistad no se limita a Monterrey.
Con sus clubes en México y el extranjero, busca fomentar la colaboración global y la solidaridad.
El lema del club es “Amistad y Civismo”,con el que refleja su compromiso con esos valores fundamentales y el rechazo a la hostilidad y el conflicto.
Desde su fundación, han abogado por la colaboración desinteresada, la defensa de los derechos humanos, la justicia y la caridad, y la promoción de una ética estricta en todas las áreas de la sociedad.
También han defendido el amor por la patria y el respeto por los valores espirituales y morales, buscando la unión y el entendimiento entre todas las naciones.
Las semillas en el vientoEn sus 87 años de existencia, el Club Sembradores de Amistad ha demostrado una solidez impresionante al continuar sirviendo a la comunidad y promoviendo valores esenciales.
Su historia es un testimonio de la importancia de la solidaridad en la construcción de una sociedad más justa y equitativa.
En un mundo en constante cambio, los principios y valores defendidos por Sembradores de Amistad siguen siendo relevantes, en la búsqueda de un futuro mejor, según expresan en su página web.
Los primeros clubes nacionales se establecieron en Monterrey, Saltillo, San Luis Potosí, Irapuato, Guadalajara, Tampico, Oaxaca, Matamoros, Ciudad Juárez y Puebla.
Mientras que en el extranjero se ubicaron en San Antonio, Houston, Corpus Christi, en Texas, en San Salvador y Saarbrücken en Alemania.
Hoy, la Asociación Internacional de Clubes Sembradores de Amistad, A.
C.
integra a Monterrey, Sierra Madre, Durango, Puebla y Corpus Christi, que trabajan en la formación de nuevos clubes.
Cabe destacar que en cada club existe un comité de damas, compuesto por socias Sembradoras y Cooperadoras, que sesionan en las casas de los socios.
También cuentan con un club juvenil, adscrito al Club Sembradores Monterrey.
El desafío: renovar filasUno de los retos más apremiantes que enfrenta la agrupación es la atracción de jóvenes a la cultura de la asistencia social.
Por ello se enfatiza la importancia de promover la educación y el civismo entre las nuevas generaciones.
Destaca que, a pesar de los avances en la región, persisten la pobreza y la pobreza extremaen México, lo que requiere un compromiso constante y una mayor generosidad por parte de toda la sociedad mexicana.
Y fue así que bajo la premisa de “el amor en lugar del odio; la colaboración de los individuos en lugar de la lucha de clases, y la siembra de amistad en vez de la siembra de enemistades” se crearon estos clubes, cuyas bases se fincaron sobre el diálogo, la tolerancia y la solidaridad; con la idea de que la amistad uniría voluntades.
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