La operación de carga en el AIFA arranca a marchas forzadas causando sobrecostos Expansión
Las aerolíneas cargueras han entrado apresuradamente al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) tras vencerse el plazo inicial del decreto que les pedía salir del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) a más tardar el pasado 7 de julio . Ahora, las cargueras tienen hasta el 1 de septiembre para dejar el aeropuerto capitalino; sin embargo, algunas de las que ya hicieron la mudanza han tenido demoras con sus clientes. Hay al menos ocho aerolíneas de carga que operan en el AIFA: DHL, Cathay Pacific, China Southern, Awesome Cargo, Emirates, Lufthansa, Air France KLM Martinair Cargo y Air Canada, y partir de mediados de agosto Estafeta. Según Isidoro Pastor, director general del aeropuerto, las 15 cargueras que operaban en el AICM hasta hace unos meses han enviado la documentación para iniciar los trámites para operar en el AIFA. “A pesar de que tenían la posibilidad de hacerlo hasta el día 1 de septiembre, lo están haciendo ya ahorita en este mes de julio”, dijo Pastor a medios hace unos días durante el arranque de los vuelos de prueba de Estafeta. “La mayoría tiene un vuelo diario, algunos son seis veces a la semana”. Sin embargo, el AIFA aún tiene carencias en términos de personal para atender las necesidades de importadores y exportadores que ya lo utilizan. Un empresario del sector de retail explica que el aeropuerto cuenta con una insuficiencia de agentes de carga y aduanales, lo que provoca que el flujo no sea el esperado. “Nosotros tenemos un proceso de importación periódico, semanal. En los últimos días nos ha tardado más el despacho de mercancías por la falta de agentes aduanales. Nos dijeron en el aeropuerto que era por la llegada de otras empresas, les subió de golpe el ritmo”, dice bajo condición de anonimato.
El aeropuerto ya cuenta con oficinas del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), de la Secretaría de Agricultura, así como de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris). Incluso está la Aduana 50 del AIFA y sus autoridades han recibido a más de 100 delegaciones de empresarios entre 2022 y este año, con la intención de “demostrar que cuentan con suficiente espacio aéreo y la capacidad por parte del personal de la Aduana para atender los procesos del despacho aduanero”, refiere la Asociación Mexicana de Importadores y Exportadores. “Según encuestas a empresas que actualmente operan en el AICM, se calcula que entre 80% y 85% de las que operan actualmente en el AICM terminarán trasladando sus operaciones al AIFA, esto es una realidad y las aerolíneas de carga lo saben. Es por ello que han avanzado en las negociaciones para tener licencia de operar en el AIFA”, explica la asociación en un posicionamiento enviado a Expansión . Para Julio Zugasti, asociado senior de Hogan Lovells y experto en el sector aeroportuario, el AIFA tendrá una curva de aprendizaje que solo podrá superarse con la infraestructura y capacidad de personal suficiente para atender los volúmenes que hasta hace unos meses tenía el AICM. “Mucho se obtiene sobre la marcha. Vamos caminando y ahí vemos cómo solucionar; sabemos que no es lo óptimo, primero deberían de tener el producto y las autorizaciones para decir ‘ven para acá’, pero se ha manejado de manera distinta. Ya tenemos dos meses más”, refiere Zugasti. Rodrigo Pérez-Alonso, socio de Koalsulting, refiere que la queja interna de la industria es que, como “no hubo planeación” y la reubicación se hizo con “mucha improvisación”, ha habido efectos en términos de costos. “Fuentes de industria me han dicho internamente que es un desastre y te genera muchos costos adicionales, porque llega la carga al AIFA y tienes que moverla en camiones al AICM para despacharla y de ahí sale, entonces al final es una ficción que esté la carga en el AIFA”, agrega. Los sobrecostos también podrían venir a través de la escasez de producto y potenciales incumplimientos contractuales, refiere la fuente que opera a través del AICM. “No digo que vaya a ser así siempre, pero mientras nos está costando dinero”. La ANIERM reconoce que el AIFA podría no ser conveniente en todos los casos, y exhortó a sus afiliados a evaluar su mejor opción. “Hacemos un llamado a los importadores y exportadores para que tomen sus precauciones y que lo antes posible puedan revisar en un tema de costo-beneficio qué aeropuerto es de mayor conveniencia para sus operaciones. Asimismo, se exhorta a los agentes de aduana asesorar a sus clientes y darles siempre la mejor opción en costos logísticos para las operaciones”, concluye el organismo.
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