OPACIDAD SIN ESCRÚPULOS Sol Yucatán
- El Idefeey privilegió con 9.8 mdp al empresario eléctrico, Josué Emir Rodríguez Sabido; sin embargo, el proveedor participó en el mismo período en otras licitaciones con al menos dos compañías diferentes.
- Los contratos celebrados por el instituto con el proveedor fueron eliminados de la Plataforma Nacional de Transparencia, así como de directorios empresariales y otros registros públicos.
- La falta de transparencia es el común denominador de las licitaciones otorgadas por el Idefeey a través de su titular, Luis Jorge Montalvo Duarte.
Redacción/Sol Yucatán
Oxkutzcab.- Durante el 2020, el Idefeey privilegió con 9.8 millones de pesos al empresario del ramo eléctrico Josué Emir Rodríguez Sabido, sin embargo, el proveedor participó en el mismo periodo en otras licitaciones con al menos dos compañías diferentes, pero que supuestamente ofrecían los mismos servicios.
La falta de transparencia es el común denominador de los contratos otorgados por el Instituto para el Desarrollo y Certificación de la Infraestructura Física Educativa y Eléctrica de Yucatán (Idefeey) a través de su titular, Luis Jorge Montalvo Duarte, lo que fortalece el estigma de corrupción del gobierno que preside Mauricio Vila Dosal.
Ejemplo de lo anterior son los contratos celebrados por la dependencia con el proveedor Josué Emir Rodríguez Sabido, durante el 2020, mismos que han sido eliminados, así como de directorios empresariales y otros registros públicos.
Un caso particular es el referente al contrato número IDE-20-OP-LP-ELE-025, celebrado el 25 de mayo de 2020, cuyo documento para consulta fue retirado de la PNT, por lo que solo quedó registro de su existencia a través de una captura de pantalla realizada en dicha plataforma.
De acuerdo con este registro, el objeto del contrato fue la “Construcción de la línea eléctrica de media tensión de la infraestructura hidroagrícola de la localidad de Emiliano Zapata, municipio de Oxkutzcab, Yucatán” y la empresa “ganadora” resultó ser Volta Promotora Eléctrica, S.A. de C.V.
Asimismo, según consta en la captura, el representante de esta empresa es Josué Emir Rodríguez Sabido, quien se embolsó por este contrato la cantidad de 9 millones 892 mil 5.52 pesos.
Curiosamente, un mes después, en junio de 2020, el Idefeey celebró otro millonario contrato (IDE-20-OP-LP- ELE-048), ahora con el objeto “reubicación de líneas eléctricas de alta y media tensión en el paso superior vehicular ‘Avenida 70’, en el kilómetro uno de la carretera Mérida-Tetiz”.
En esta ocasión, la empresa ganadora de la licitación fue Infraestructura CER, S.A. de C.V., propiedad de, nada más y nada menos, Josué Emir Rodríguez Sabido.
Es decir, ninguno de los funcionarios del Idefeey que participaron en la asignación de estos contratos pudo siquiera sospechar que existían irregularidades en el hecho que dos empresas que ofrecían los mismos servicios declararan tener el mismo administrador.
Por lo demás, es significativo que los funcionarios del Idefeey encargados de cada contratación, con Luis Jorge Montalvo Duarte al frente, le dieran el visto bueno a los documentos presentados por Rodríguez Sabido.
Incluso, para la adjudicación ganada por Infraestructura CER, el entonces presidente de la Asociación Yucateca de Constructores Eléctricos, Jorge Toledo Fuentes, denunció al Idefeey por adjudicar la obra de electrificación, no obstante las numerosas irregularidades y fallas en el proceso de licitación.
De hecho, Toledo Fuente, cuya empresa Grupo Constructor Toledo S.A. de C.V., participó en la licitación, señaló que informó del caso a la Secretaría de la Contraloría General del gobierno del Estado, a la que pidió la suspensión de la obra pero, pese a las pruebas, la dependencia rechazó la suspensión y validó la decisión del Idefeey.
Como dato adicional, el instituto señaló que eligió la propuesta de Infraestructura CER por ofrecer la mejor propuesta económica, sin embargo, Toledo Fuentes aseguró su proposición fue la más baja de las tres presentadas al concurso.
Regresando al contrato ganado por Volta Promotora Eléctrica, aunado a la falta de disponibilidad del documento, tampoco está disponible el estudio de impacto urbano y ambiental, a pesar que los trabajos iniciaron días después de firmarse el contrato; solo se sabe que las obras empezaron el 2 de junio de 2020, para terminar a más tardar el 20 de septiembre del mismo año.
De igual forma, tampoco se tiene información sobre las otras compañías concursantes y sus propuestas, ni documentación que permita verificar la entrega y finalización de las obras realizadas, así como la correcta aplicación de los recursos públicos, que provinieron del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas (FAFEF).
Tal parece que la falta de acceso a los contratos de la Idefeey representa un retroceso para el Estado en materia de disponibilidad de información, pues como lo hemos señalado, estas prácticas no ofrecen claridad, transparencia ni certeza sobre la manera en que las dependencias otorgan las licitaciones públicas.
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