Fracturados: un crudo reflejo teatral de las pasiones y maldades humanas La Razón
Tras presentarse en foros como el Foro Shakespeare y una realizar una gira alrededor del país, llega al Casino Life “Fracturados”, obra teatral escrita y producida por Iván Raday que aborda temas escabrosos y oscuros, pero cercanos como el deseo, los excesos, la agresión sexual y la traición.
La puesta escénica se centra en un grupo de supuestos amigos que comparten un departamento, el cual se convertirá en el escenario de una fiesta que será la excusa para la perfidia: Ana y Víctor planean su primer encuentro sexual, mientras la mejor amiga de ella lo desea con fervor a él.
Asimismo, el mejor amigo de Víctor tiene planeado abusar de la novia de su “camarada” y robarle su virginidad, cueste lo que cueste.
“’Fracturados’ nace de la necesidad de hablar de lo que pasa en este entorno egoísta, porque somos como islas y no nos importa lo que esté ocurriendo pasando a nuestro alrededor, nos hacemos ajenos al dolor humano con tal de satisfacer nuestros deseos”, explicó Iván Raday a La Razón.
Para crear a los personajes, el también actor contó que hizo un arduo trabajo de observación de las personas de su entorno, motivo por el cual afirmó que estos no son ni buenos ni malos, sino que son una expresión de la humanidad.
“Lo que se ve en escena es un reflejo de lo que he podido ver a mi alrededor, en amigos, familiares y conocidos; historias que no son ajenas para nadie y eso hace maravillosos a los personajes, pues son reales y más allá de buenos o malos son una expresión de nuestra humanidad”, apuntó.
“Quiero ser lo más franco posible para habar de estas verdades que ocurren de tras de cada puerta, de una forma clara y contundente para que la gente se sienta identificada, reflexione las heridas que tenemos como individuos e invitarlos a ser un poco más empáticos”, agregó.
Por ello, Iván Raday consideró necesario que las obras de teatro, y el arte en genera, aborde temáticas sociales crudas como la de “Fracturados”, pues señaló que es deber de los creadores poner bajo el reflector lo que ocurre en el mundo y generar conciencia en el espectador.
“El arte no tiene que ser estéril o quedarse en lo hermoso y bello; sino que también puede ser confrontativo y revelador. Nosotros como artistas tenemos la obligación de ser espejo y cronistas de nuestra sociedad, levantar la voz y hacer conciencia, y el hecho de que tengas un foco sobre ti te da la facilidad de hacerlo”, setenció.
“Y, en estas fechas de pandemia, debemos recordar que no todo es COVID y no olvidar que también existe la violencia contra la mujer el VIH, las agresiones sexuales y los suicidios”, finalizó.
AG
