En imágenes: así fue la asistencia de Petro a la ceremonia del papa León XIV, que asume como nuevo líder de la Iglesia católica Infobae
La Plaza de San Pedro fue escenario el domingo 18 de mayo con una jornada significativa para la Iglesia Católica, con la ceremonia oficial de inicio del pontificado de Robert Prevost, ahora León XIV. Entre los asistentes a este acto litúrgico se encontró el presidente de Colombia, Gustavo Petro Urrego, que acudió acompañado de su hija menor, Antonella Petro. Ambos ocuparon una de las primeras filas, en un lugar privilegiado, desde donde presenciaron cada uno de los momentos del evento encabezado por el nuevo sumo pontífice.
La visita del mandatario colombiano al Vaticano se dio como parte de una destacada representación latinoamericana en la ceremonia religiosa. A su llegada a la Ciudad del Vaticano, Gustavo Petro fue captado por las cámaras descendiendo del vehículo oficial junto a su hija, mientras se dirigían al lugar de la celebración. Vestido con un traje oscuro, el presidente saludó a algunos de los asistentes y se ubicó posteriormente en el costado lateral del altar central.
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Además del jefe de Estado colombiano, asistieron a la misa de inicio de pontificado otros presidentes de la región, como Daniel Noboa, presidente de Ecuador, que se hizo presente junto a su esposa, y ambos compartieron ubicación con Petro en el mismo sector de la plaza. Por su parte, el mandatario paraguayo, Santiago Peña, llegó acompañado también por su cónyuge, luego de realizar una visita previa a la tumba del papa Francisco.
Todos ellos se sumaron a la jefa de Estado de Perú, Dina Boluarte, que encabezó la delegación de su país y ocupó la primera fila, debido a la nacionalidad peruana que también posee el nuevo papa.
La ceremonia dio inicio en la sacristía, junto a la escultura de la Piedad de Miguel Ángel, donde el papa León XIV recibió los paramentos litúrgicos. Luego, acompañado por los patriarcas y arzobispos mayores de las iglesias católicas orientales, se dirigió a la tumba de san Pedro para un momento de oración. Este acto precedió la misa central, celebrada frente a miles de fieles y delegaciones oficiales provenientes de diversas partes del mundo.
Durante la liturgia, las cámaras enfocaron en varias oportunidades a los líderes latinoamericanos, quienes permanecieron atentos a cada detalle del rito. Gustavo Petro, en particular, fue registrado realizando breves conversaciones con Daniel Noboa antes del inicio formal de la misa, sin apartarse de su hija.
El acto del domingo marcó el comienzo oficial del liderazgo espiritual del papa León XIV, sucesor de Francisco, elegido por el cónclave el 8 de mayo de 2025. Aunque el anuncio de su elección se dio con el tradicional humo blanco que emanó de la chimenea de la capilla Sixtina, fue esta ceremonia en la plaza la que marcó el inicio efectivo de su pontificado. La misa incluyó pasajes en varios idiomas, simbolizando la universalidad de la Iglesia, y fue seguida por fieles desde diversos puntos del mundo a través de transmisiones en directo.
A lo largo de la jornada, se difundieron múltiples imágenes de la ceremonia que mostraron tanto la solemnidad del acto como la diversidad de la audiencia. El papa, tras recibir los ornamentos papales y pronunciar la homilía, fue acompañado por una procesión litúrgica que concluyó con la bendición apostólica, símbolo del inicio de su responsabilidad pastoral al frente de la Iglesia Católica.
Las delegaciones internacionales comenzaron a retirarse una vez finalizada la bendición, no sin antes saludar a representantes del Vaticano y algunos miembros del clero presentes. Gustavo Petro permaneció durante todo el acto, una jornada que se extendió por varias horas.
Este acto representó no solo el inicio de un nuevo pontificado, sino un momento de encuentro entre líderes políticos y religiosos, donde la presencia de mandatarios latinoamericanos reflejó una participación activa de la región en uno de los eventos más significativos del calendario vaticano. Las imágenes difundidas durante la jornada capturaron tanto los aspectos protocolares como los instantes más personales de cada uno de los asistentes, particularmente la asistencia familiar del presidente Petro, quien compartió con su hija menor esta ceremonia histórica.
