Reportan boda de dos menores en Guerrero; autoridades niegan matrimonio legal Editorial Aristegui Noticias
Dos menores habrían celebrado una boda en la comunidad indígena de San Pedro Cuitlapan, municipio de Tlacoachistlahuaca, Guerrero, entidad cuyo Código Penal local prohíbe los matrimonios infantiles.
Medios locales reportan que, a pesar de que, hasta el momento, no se ha determinado con certeza la edad exacta de los jóvenes, ninguno de los dos cuentan con la mayoría de edad.
En redes sociales se difundieron videos y fotografías del evento ocurrido el domingo 4 de mayo, donde se observa a una pareja vestida de novios, bailando el vals rodeados de familiares e invitados.
Según reportes, los menores aparentan tener entre 12 y 15 años, aunque no hay datos oficiales que confirmen sus edades. La celebración incluyó música y consumo de bebidas alcohólicas.
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El matrimonio infantil está prohibido en Guerrero desde 2022, con reformas impulsadas durante la actual administración estatal.
El Código Penal establece penas de 5 a 15 años de prisión y multas para quienes celebren, soliciten o induzcan un matrimonio con menores de edad.
A pesar de ello, en algunas comunidades indígenas persisten estas prácticas bajo el argumento de usos y costumbres.
Roberto Barreto Bohórquez, titular de la Coordinación Técnica del Sistema Estatal del Registro Civil, aclaró en entrevista con El Sol de Acapulco que no se llevó a cabo ningún matrimonio civil ni acto legal en esta boda.
Dijo que, hasta donde tiene conocimiento, se trató de una fiesta organizada por las familias para festejar que los jóvenes son novios y quizá se prometieron casarse en el futuro, recalcando que no hubo ningún acto de matrimonio formal.
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Barreto destacó que ningún oficial del Registro Civil participó en el evento y que, de haberse celebrado un matrimonio legal, tendría que haberse notificado al presidente municipal para tomar medidas, incluida la cancelación y sanciones a los responsables.
No obstante, reconoció durante la entrevista que algunas comunidades indígenas mantienen ceremonias simbólicas basadas en sus usos y costumbres, aunque insistió en que estas no tienen validez legal y no pueden ser reconocidas por la vía civil.
