SIN LÍNEA Sol Yucatán
- No quiere narcotraficantes, por más famosos que estos sean
- Exige narcopolíticos y hasta que no se actúe, no cesarán las andanadas
José Sánchez López
“Los traficantes de fentanilo operan sin trabas gracias a la relación que mantienen con el gobierno de México”.
Fue uno de los últimos mensajes de Estados Unidos al gobierno de la presidente, Claudia Sheinbaum Pardo, quien calificó esa postura como ofensiva, difamatoria y sin sustento.
Por favor, no se necesitan más de dos dedos de frente para entender el mensaje.
¿No le ha quedado claro que de nada sirvieron los 10 mil soldados, camuflados de guardias nacionales que mandó a la frontera, los decomisos de fentanilo, los más de 5 mil generadores de violencia que ha detenido Omar Hamid García Harfuch, ni tampoco los 29 capos que le entregó en bandeja?
Nada de eso ha sido suficiente.
Volvamos al mensaje: “los narcos mexicanos operan sin problemas gracias a la relación (¿contubernio?) que mantienen con el gobierno de México.
¿Así o más claro?
El ambivalente Donald Trump, que lo mismo califica a Sheinbaum Pardo como una mujer encantadora y excepcional, que le advierte que no se ha hecho lo necesario, que todavía tiene que hacer más.
¿Y qué es lo que tendría que hacer la presidente?
Para empezar, deslindarse de Andrés Manuel López Obrador, pero de una manera clara, sin disfraces ni tapujos.
Es más que claro, que aunque no se atreva a admitirlo públicamente, dejó atrás aquello de “abrazos y no balazos”.
Así lo demuestran los no menos de 100 criminales abatidos por las Fuerzas Armadas, desde que llegó a la Presidencia, aun así sigue mostrando apego al que llama el “mejor presidente de México” y no se atreve, en público, a contradecir a quien también llamaron “narcopresidente”.
Pero las exigencias de Donald Trump podrían cambiar diametralmente el panorama, aunque para ello tendría que dejar de elogiar a su mentor y simplemente enfocar sus baterías hacia su gabinete, gobernadores y miembros del Poder Legislativo, que es donde prolifera esa especie.
¿Nombres? No me diga que no los ha oído.
Han sido mencionados una y otra vez, lo mismo en medios que en señalamientos, a veces hasta de sus mismos compañeros de partido.
El mismo López Obrador es quien encabeza esa lista, de acuerdo a investigaciones de la DEA, el FBI y el Departamento de Estados de los Estados Unidos, dados a conocer por la periodista Anabel Hernández García.
Investigaciones que no han quedado cerradas y que “se pausaron” por motivos políticos cuando el ex presidente andaba en amaña en pos de la presidencia, pero que ahí están y que podrían reactivarse en cualquier momento y el mismo López lo sabe, tan es así que ni por equivocación se atreve a ir a los Estados Unidos. Está consciente, al igual que Nicolás Maduro Moros, presidente de Venezuela, lo que podría ocurrir.
Asimismo. en reportes de inteligencia, hackeados por Guacamaya Leaks, también aparecen Rubén Rocha Moya, Adán Augusto López Hernández, Nidia Tapia Quintero, José Ramón Enríquez Herrera, José Paz López Elenes, Virgilio Mendoza Amezcua, Salvador Cienfuegos Zepeda, los hermanos Monreal Ávila y muchos otros más, lo mismo senadores que diputados, alcaldes, síndicos regidores, gobernantes, etcétera y etc.
¿La presidente seguirá con esa actitud soberbia, enarbolando el estandarte de la soberanía?
No se trata de agachar la cabeza sino de actuar con inteligencia.
Cuidado, señora presidente, no complique aún más la situación.
Cabeza fría, como usted dice, pero sobre todo cordura e inteligencia.
Es momento de demostrar que llegó hasta ese nivel para gobernar y no para seguir prestándose a pantomimas.
Demuestre con hechos que no es ninguna marioneta, sino realmente una gobernante excepcional, como la califica su “amigo” Trump.
Donde hay soberbia hay ignorancia, donde hay humildad hay sabiduría. Au revoir.
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