Frutas seguras para los gatos, alimentos ricos en nutrientes Infobae
El gato doméstico es un animal cuya dieta está compuesta principalmente de carne y sus derivados, a pesar de esto, de vez en cuando pueden ser alimentados con una que otra fruta.
Es necesario saber que existen frutos que no representan ningún riesgo para los felinos y que hay otros que son completamente seguros.
Al ser animales carnívoros, no se debe sustituir su dieta principal con fruta y en caso de querer añadirlas a su alimentación, se deberán ofrecer únicamente un par de trozos o porciones muy pequeñas.
¿Qué frutas puede comer mi gato?
De acuerdo con la marca de alimento para mascotas Purina, muchas de las frutas que consumen los humanos son seguras para gatos y pueden tener una doble función: ser una gran fuente de vitaminas y un snack refrescante en épocas de calor.
Sólo se deben ofrecer cantidades pequeñas de fruta, pues el sistema digestivo de los gatos está diseñado para procesar principalmente los alimentos provenientes de una dieta basada en carne.
Asimismo, la empresa de alimento para mascotas recomienda que en caso de que los dueños decidan recompensar a sus gatos, opten por fruta fresca sobre la enlatada o procesada que puede contener aditivos o conservadores que podrían afectar negativamente a la mascota. De cualquier forma, siempre es recomendable consultar con un veterinario antes de introducir algún alimento nuevo a la dieta.
Algunas de las frutas que pueden consumir los gatos son:
Arándanos:
Estas pequeñas bayas son saludables para los gatos y son ricos en vitaminas, fibra y antioxidantes, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de infecciones en el tracto urinario (ITU) que, según la VCA Animal Hospitals (VCAAH), son bastante poco comunes y generalmente ocurren cuando las bacterias viajan por la uretra hasta la vejiga.
De acuerdo con los especialistas de la VCAAH, existe evidencia de que dietas específicas pueden favorecer la salud del tracto urinario inferior, sin embargo, lo más recomendable siempre será acudir a un veterinario a la hora de informarse sobre cómo evitar éste tipo de afecciones.
Bananas o plátano:
Es una fruta rica en vitamina B6, C, potasio y carbohidratos, nutrientes que son de gran ayuda para los músculos y la presión arterial, pero hay que tener cuidado a la hora de dárselo a los gatos, pues contienen una gran cantidad de azúcar.
Lo más recomendable es ofrecerlos como premio de vez en cuando. La marca de alimento para mascotas recomienda cortarlos en rodajas pequeñas y ofrecerlos frescos o congelados, pues puede que los felinos disfruten del crujido.
Fresa o frutilla:
Este fruto rojo es sumamente rico en vitamina C, B1, B6, antioxidantes y otros nutrientes más que pueden ser de gran ayuda para el sistema inmunológico felino.
Se debe tener precaución con dicha fruta y primero es necesario retirar tanto el tallo como las hojas y lavarlas a profundidad para eliminar cualquier tipo de suciedad. Recomiendan no servir más de una o dos piezas que pueden ser presentadas frescas, congeladas o en puré.
Manzana:
Las manzanas deben servirse sin semillas ni tallo; son ricas en fibra, vitaminas A, C, K, antioxidantes y calcio.
Uno de los aspectos a favor de esta fruta es su textura crujiente, misma que puede llamar la atención de los gatos. Según la marca de alimento, están constituidas por aproximadamente un 86% de agua, por lo que puede ser una excelente opción para hidratarlos.
Se recomienda cortarlas en rodajas pequeñas o en cubos y servir únicamente uno o dos trozos, evitando a toda costa el tallo y semillas, que pueden contener pequeñas cantidades de cianuro, producto químico venenoso para muchos seres vivos.
Melón:
El melón es rico en vitaminas A, C, B y betacaroteno, encargado de ayudar con la visión; tiene un alto contenido de agua y pocas calorías.
Esta fruta es ideal para aquellos gatos que no se hidratan lo suficiente. Purina señala que es probable que a los gatos les atraiga este fruto debido a su olor similar al de las proteínas de la carne
Piña o ananá:
Esta fruta tropical perenne contiene vitaminas y minerales como el magnesio y potasio útiles para reforzar tanto el sistema digestivo como inmunológico del gato.
Al igual que las bananas tiene un alto contenido de fructosa, por lo que se recomienda ofrecer pequeñas cantidades una después de pelarlas.
Sandía:
Igual que el melón, la sandía tiene un alto contenido de agua y es rica en vitaminas A, B y C. Son una gran fuente de potasio y ayuda a mantener la presión arterial en niveles adecuados.
Esta “super fruta” es básicamente “agua texturizada” que puede ser de gran ayuda a la hora de refrescar a los gatos, no obstante, es necesario retirar todas las semillas y cáscara antes de servirla.
