El cambio en México se hizo desde abajo, no quiero ser caudillo, afirma AMLO Milenio

El presidente Andrés Manuel López Obrador confió en que la transformación que él inició en México continuará cuando él ya no esté, porque no pretende ser caudillo, y a diferencia de otras revoluciones que no se cristalizaron, ahora el pueblo también cambió su mentalidad e incluso Morena puede correrse ideológicamente hacia el centro.
En la entrevista que concedió a la periodista rusa, Inna Afinogenova, del Canal Red Latinoamérica, el presidente López Obrador habló en su despacho de Palacio Nacional de la sucesión presidencial.
“Cierro un ciclo, hemos logrado entre todos, desde abajo, una trasformación en el país, hay resultados, está bien el relevo generacional, nos va a ir bien, el porvenir viene acompañado de la justicia y tiene rostro de mujer”.
Reiteró que al concluir su mandato se alejará de la vida pública, porque ya ayudó mucho al movimiento, pero no es la lucha de un líder.
“No quiero ser hombre fuerte, líder moral, jefe máximo, caudillo, mucho menos cacique, quiero dar espacio a que otros participen, además ya se avanzó bastante en algo que es fundamental, el cambio de mentalidad del pueblo de México, nosotros llamamos a eso revolución de las conciencias.
“Entonces no es un movimiento el nuestro de una vanguardia, de un grupo de dirigentes, mucho menos de un líder, es el movimiento de todo un pueblo, por eso estamos muy contentos porque hay veces que se llevan a cabo revoluciones y no se logra un cambio de mentalidad”Entrevista con Andrés Manuel López Obrador?–¿Siente que en la 4T se ha podido lograr ese cambio?“Sí y de manera pacífica”, expresó.
Y sostuvo que habrá continuidad de la 4T, y quedará en buenas manos.
“¿Qué tiene Claudia que no tiene AMLO? -le preguntó la periodista- Tiene todo, está más preparada que yo, habla inglés, a mí me cuestionaban.
“Una ventaja competitiva para un presidente -interrumpió Afinogenova- Depende cómo lo veas, yo te diría que ayuda mucho, a veces, en política, si se trata de en inglés de no hablarlo, para tener traducción porque te da tiempo de pensar lo que vas a decir”.
Y luego continuó definiendo a Claudia Sheinbaum: “es muy inteligente, académicamente es más que yo, yo apenas y terminé la licenciatura y ella es doctora, es una mujer con convicciones, con principios, honesta tiene muchos méritos”.
Al ser cuestionado sobre la posibilidad de que su partido, Morena pueda cambiar de rumbo, López Obrador, respondió que “si, se podría correr al centro y no hay problema por lo que comentábamos, el cambio en México lo hemos hecho desde abajo y entre todos”.
Durante la larga plática que se prolongó durante dos horas y 15 minutos, el mandatario confesó, que pidió a un brujo, hacerle una “limpia” a la famosa silla presidencial.
“Sé que hay una silla presidencial que dicen que está embrujada -le dijo la entevistadora-– ¡Sí! ¿Cuál es?–Pero ya no es esa, respondió el presidente señalando la silla de su despacho.
–pero ¿usted se sienta ahí?– Nada más que la mandé a limpiar.
–¿la mandó a limpiar?–¡Sí! Yo tengo amigos científicos –¡Amigos científicos! -expresó AfinogenovaQue saben de limpias, pero–¿de limpiar de malos espíritus? Se le llama coloquialmente, aunque yo soy místico, creo que no todo tiene que ver con lo racional, entonces se le llama coloquialmente brujos ¡Brujos! Entonces, es que hay brujos buenos y hay brujos malos.
La tenemos abajo en el museo, respondió el presidente aclarando el destino de la supuesta silla presidencial embrujada en la que no quiso sentarse Emiliano Zapata, pero sí Francisco Villa, según consta en la histórica fotografía de la época revolucionaria.
La periodista intentó con preguntas directas para sacar algunas anécdotas, que por momentos el mandatario evitaba.
Ella le preguntó qué le diría el AMLO del presente al de 2006 y él respondió que ahora es un hombre “más experimentado”, sin embargo, eso no significa que pueda ser “insustituible”, de ahí la importancia de cerrar su ciclo al concluir su mandato.
“¿Qué tenía el AMLO de entonces? Más oportunidad de sacar más rápido del atraso al país y que a estas alturas ya sería una potencia económica, nuestro país, somos una potencia mundial, en lo cultural”.
Lo que sí terminó por admitir el presidente, es que no encontrar a los jóvenes desaparecidos de Ayotzinapa, es su asignatura pendiente.
- “Algo que le produzca tristeza no haber terminado ¿Ayotzinapa?”, preguntó la periodista.
-“Ayotzinapa puede ser, el no encontrar a los jóvenes, hasta ahora.
-¿Cree que se va a saber? -No hemos dejado de enfocarnos y que se han castigado quienes han participado, pero lo más importante es encontrar a los jóvenes, en eso estamos sí tienes razón, esa sería asignatura pendiente, que me dolería no resolver, pero todavía tenemos tiempo y vamos bien.
-“Un momento del que esté más orgulloso, de sus seis años ¿cuál sería? -El haber reducido la pobreza, a pesar de la pandemia” y así finalizó la entrevista.