Elon Musk se sincera sobre los videojuegos: \'Matar demonios en juegos calma a los demonios de mi cabeza\' Vandal
24 de Abril, 2024 04:33
El polémico director general de Tesla, Elon Musk, explica en una entrevista por qué le gustan los videojuegos: 'matar demonios en un videojuego calma a los demonios de mi cabeza"El director general de Tesla y magnate sudafricano Elon Musk ha concedido una larga entrevista de más de dos horas al podcaster Lex Fridman en la que habla de múltiples temas, desde la guerra de Israel contra los territorios palestinos a los alienígenas, la red social X que compró en 2022 o su relación con los videojuegos, de los que dice "son mi principal entretenimiento", que procede de cuando era joven y se han mantenido en el tiempo.
Fridman pregunta a Musk qué le aportan los videojuegos en general a lo que el magnate responde: "No sé, me tranquilizan la mente, es como si al matar demonios en un juego se calmasen los demonios de mi cabeza.
Si juegas a un videojuego desafiante puedes entrar en un estado de flow, que es muy placentero".
Musk juega a Diablo IV de manera habitual yPero para ello debe cumplirse una condición, sigue diciendo: "Admito que debe ser el punto justo, ni demasiado fácil ni demasiado difícil, sino la dificultad justa.
Supongo que quieres sentir que estás avanzando en el juego.
Y también que tenga un diseño visual bonito, una historia que te enganche.
Es como resolver un puzle brillante".
Jugador profesional de Quake en el pasadoMusk explica en la entrevista que juega como un druida a Diablo IV y no ha conseguido vencer a Uber Lilith y recuerda que en el pasado se convirtió en jugador profesional de Quake "en un momento dado me convertí en uno de los mejores jugadores de Quake de todo el mundo", afirma.
Fridman también pregunta por Elden Ring, del que Musk afirma: "Sin duda, es un candidato al mejor juego de todos los tiempos, sin duda está entre los mejores cinco.
Es como si estuviera diseñado por un extraterrestre.
Es inusual, increíblemente creativo y el arte es impresionante".
